Aquel anciano que alguna vez calificó a Bitcoin como "juego de azar", recientemente hizo una movida que deja a todos boquiabiertos: invirtió 15 mil millones de dólares en un proveedor de servicios de criptomonedas. ¿Irónico? Él ni siquiera toca las monedas, pero a través de la plataforma Nubank permite a los usuarios hacer trading de criptomonedas, mientras él se sienta a recoger las comisiones de servicio. La estrategia es bastante clara: en lugar de seguir la tendencia comprando monedas, es mejor hacer un negocio de "vender agua", ganando de manera estable las ganancias del ecosistema.

Pero hay un cambio aún más interesante que está ocurriendo. Bitcoin ya no es solo un activo de almacenamiento esperando que suba, el mecanismo PoL de Berachain ha ideado una nueva forma de jugar: BTC puede participar en staking, y al bloquearse puede generar ingresos, como recibir un salario periódicamente. beraBTC equivale a una "tarjeta de trabajo", transformando activos ociosos en flujo de caja. Mientras tanto, BVT actúa como una especie de alcancía con derechos de gobernanza, con beneficios que se recompran y se destruyen, formando un ciclo de valor completo.

Así que la situación actual es la siguiente: por un lado, el capital tradicional construye puentes y gana comisiones, y por otro, el ecosistema cripto diseña nuevos mecanismos para "emplear" los activos. La historia de BTC ha entrado en una nueva etapa — ya no se trata solo de si apreciará o no, sino de cómo hacer que el dinero realmente trabaje.