Al ver esta colaboración entre Potatoz y MOMAX, de repente siento que las formas de jugar en Web3 son cada vez más cercanas a la vida real.

Esta vez han lanzado directamente tres productos físicos: una batería externa, un altavoz inalámbrico y un adaptador de viaje. Nada de conceptos abstractos, simplemente cosas que usas en tu día a día. Lo clave es que estos productos están directamente vinculados al ecosistema $MEME, llevando así la IP on-chain a las estanterías.

La idea en realidad es bastante inteligente: los usuarios de Web2 pueden no entender nada de NFT o tokens, pero ¿quién no necesita una batería externa? Al entrar por productos de uso diario, es fácil atraer a gente ajena al mundo cripto. Si una IP quiere llegar al gran público, no basta con celebrarlo solo dentro de la comunidad; hay que hacer que los consumidores normales se encuentren con tus productos en situaciones cotidianas.

La jugada de Potatoz sirve como caso de referencia para otros proyectos Web3 que quieran salir de su nicho: deja de pensar solo en lanzar tokens o hacer airdrops; a veces, crear productos físicos puede ser mucho más efectivo.