Las acciones de automóviles europeas acaban de recibir un impulso. El último movimiento de Trump, al derogar las estrictas normas de eficiencia de combustible, provocó un repunte entre los fabricantes tradicionales: las acciones subieron a medida que disminuía la presión regulatoria. Este cambio señala una posible ralentización en el calendario de transición forzada hacia los vehículos eléctricos, otorgando margen de maniobra a los fabricantes convencionales. Los mercados reaccionaron con rapidez, y los inversores apostaron por una ampliación de los periodos de rentabilidad para la producción de motores de combustión. Cambios de política como este tienen repercusiones que van más allá de la renta variable, sugiriendo reajustes energéticos e industriales más amplios que podrían transformar las cadenas de suministro y los flujos de capital.
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HashRateHustler
· 12-04 12:25
Las ventajas políticas para los fabricantes de automóviles tradicionales son reales esta vez, pero la ola de los vehículos eléctricos es imparable, es solo cuestión de tiempo.
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DegenDreamer
· 12-04 12:17
Ja, los fabricantes de automóviles tradicionales han vuelto a la vida, esta orientación política es realmente... el capital siempre apuesta por esto.
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AirdropHarvester
· 12-04 12:08
Jaja, ahora los fabricantes de automóviles tradicionales podrán sobrevivir unos años más, pero ¿de verdad crees que podrán frenar la oleada de los vehículos de nueva energía?
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NotGonnaMakeIt
· 12-04 12:01
Jajaja, qué risa, los fabricantes de coches tradicionales han revivido otra vez, ahora los coches de gasolina podrán aguantar unos años más.
Las acciones de automóviles europeas acaban de recibir un impulso. El último movimiento de Trump, al derogar las estrictas normas de eficiencia de combustible, provocó un repunte entre los fabricantes tradicionales: las acciones subieron a medida que disminuía la presión regulatoria. Este cambio señala una posible ralentización en el calendario de transición forzada hacia los vehículos eléctricos, otorgando margen de maniobra a los fabricantes convencionales. Los mercados reaccionaron con rapidez, y los inversores apostaron por una ampliación de los periodos de rentabilidad para la producción de motores de combustión. Cambios de política como este tienen repercusiones que van más allá de la renta variable, sugiriendo reajustes energéticos e industriales más amplios que podrían transformar las cadenas de suministro y los flujos de capital.