El mercado de valores y el mercado de deuda se desploman, y el gobierno no dice nada: ¿qué está pasando?

Los minoristas están desesperados, mientras que Vanke se mantiene firme como un perro viejo. O realmente se ha enfriado, o... ¿esto es simplemente una trampa para toros? Los principales actores están deliberadamente presionando el mercado para limpiar las posiciones, esperando que todos vendan a pérdida, y luego de repente viene un giro en V. Sin embargo, el sector inmobiliario está bajo la presión de la regulación del mercado de bienes raíces, por lo que es difícil recuperarse a corto plazo.

Hablando con sinceridad, la situación actual es bastante delicada: las acciones tecnológicas han caído y rebotado, y es fácil quedar atrapado al comprar en la cima; las acciones inmobiliarias, por otro lado, están acelerando su caída, como si fuera un último y loco salto. Desde el punto de vista técnico, es posible que estas últimas ya estén cerca de un mínimo histórico.

¿El momento de comprar acciones inmobiliarias ha llegado realmente? Pero recuerda, hay muchas historias de comprar en el medio de la montaña.