Todos hemos visto esos números en pantalla: precio de mercado, valor en libros… pero ¿sabemos realmente qué significan y cuándo aplicarlos? Aquí te lo aclaramos sin tecnicismos.
El juego de los tres valores
Cada acción tiene tres “precios” diferentes, y no es un error: son tres perspectivas distintas de la misma empresa.
Valor nominal = El precio de salida
Es lo que pagaste cuando la empresa sacó sus primeras acciones al mercado. Fórmula simple: capital social ÷ número de acciones = valor nominal.
Ejemplo: Si una empresa levanta 6.5M € emitiendo 500K acciones → cada acción vale 13 € nominalmente.
La realidad: Este número pierde relevancia rápido. Solo importa en casos especiales como bonos convertibles. Para trading diario, olvídalo.
Valor contable = Lo que dice la contabilidad
Toma todo lo que posee la empresa (activos) menos lo que debe (pasivos), luego divide por acciones emitidas.
Fórmula: (Activos - Pasivos) ÷ Número de acciones = Valor neto contable.
Ejemplo: Una empresa con 7.5M € en activos y 2.4M € en pasivos, con 580K acciones → valor contable = 8,775 €/acción.
Por qué importa: Los inversores value (estilo Warren Buffett) lo usan para detectar empresas baratas. Si el precio de mercado está por debajo del valor en libros, la acción podría estar infravalorada.
Valor de mercado = Lo que la gente paga realmente
Es el precio que ves cuando abres tu terminal. Se calcula: capitalización bursátil ÷ acciones emitidas.
Ejemplo: Una empresa cotiza a 6.94B € con 3.02M acciones en circulación → precio de mercado = 2,298 €/acción.
La verdad incómoda: No te dice si es caro o barato. Solo dice “aquí estamos”. El mercado lo fija cada segundo según oferta y demanda.
Cuándo usar cada uno
Valor nominal: Prácticamente nunca en trading de acciones. Caso de excepción: bonos convertibles donde establece un precio de canje predeterminado.
Valor contable: Tu mejor aliado si practicas value investing. Compara el ratio P/VC (Precio/Valor Contable) entre competidores. Si Empresa A tiene P/VC = 0.8 y Empresa B = 1.2, la primera está más barata en términos contables.
Limitación: Falla estrepitosamente con tecnológicas y startups (tienen pocos activos tangibles pero alto valor intangible).
Valor de mercado: Es tu punto de entrada y salida. Aquí ejecutas compras/ventas. Úsalo con órdenes límite si esperas mejores precios:
Orden de compra limitada si crees que caerá más
Orden de venta limitada si quieres maximizar ganancias
Las trampas de cada método
Valor nominal: Obsoleto, casi sin utilidad práctica en renta variable moderna.
Valor contable: Puede contener “trampas contables” (maquilleo de cifras). Además, no capta bien el verdadero valor de empresas intensivas en I+D o con marca fuerte.
Valor de mercado: Es el más volátil. Se mueve por rumores, expectativas futuras, decisiones de bancos centrales sobre tipos de interés, noticias sectoriales… A veces desconecta completamente de la realidad financiera.
Caso real: Una política agresiva de tipos de interés puede hundir el valor de mercado aunque los fundamentales de la empresa no cambien.
Tabla rápida de referencia
Aspecto
Nominal
Contable
Mercado
Se calcula con
Capital social ÷ acciones
Activos - Pasivos ÷ acciones
Capitalización ÷ acciones
Te dice
Punto de salida histórico
Si la empresa vale según contabilidad
Precio real de compra/venta
Mejor para
Casi nada
Value investing + comparativas
Operativa diaria
Riesgo
Irrelevante
Contabilidad creativa + problemas con tech
Sobreinterpretación de datos
El consejo final
No confíes en un solo número. Un inversor smart combina:
Valor contable para detectar ganas
Precio de mercado para ejecutar
Ratios complementarios (PER, ROE, etc.) para validar decisiones
La mejor estrategia es usar los tres como herramientas distintas, nunca una sola. El valor nominal es prácticamente descartable, pero los otros dos forman una dupla que, bien interpretada, te ahorra errores costosos.
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Tres formas de valorar acciones: cuál usar según tu estrategia
Todos hemos visto esos números en pantalla: precio de mercado, valor en libros… pero ¿sabemos realmente qué significan y cuándo aplicarlos? Aquí te lo aclaramos sin tecnicismos.
El juego de los tres valores
Cada acción tiene tres “precios” diferentes, y no es un error: son tres perspectivas distintas de la misma empresa.
Valor nominal = El precio de salida Es lo que pagaste cuando la empresa sacó sus primeras acciones al mercado. Fórmula simple: capital social ÷ número de acciones = valor nominal.
Ejemplo: Si una empresa levanta 6.5M € emitiendo 500K acciones → cada acción vale 13 € nominalmente.
La realidad: Este número pierde relevancia rápido. Solo importa en casos especiales como bonos convertibles. Para trading diario, olvídalo.
Valor contable = Lo que dice la contabilidad Toma todo lo que posee la empresa (activos) menos lo que debe (pasivos), luego divide por acciones emitidas.
Fórmula: (Activos - Pasivos) ÷ Número de acciones = Valor neto contable.
Ejemplo: Una empresa con 7.5M € en activos y 2.4M € en pasivos, con 580K acciones → valor contable = 8,775 €/acción.
Por qué importa: Los inversores value (estilo Warren Buffett) lo usan para detectar empresas baratas. Si el precio de mercado está por debajo del valor en libros, la acción podría estar infravalorada.
Valor de mercado = Lo que la gente paga realmente Es el precio que ves cuando abres tu terminal. Se calcula: capitalización bursátil ÷ acciones emitidas.
Ejemplo: Una empresa cotiza a 6.94B € con 3.02M acciones en circulación → precio de mercado = 2,298 €/acción.
La verdad incómoda: No te dice si es caro o barato. Solo dice “aquí estamos”. El mercado lo fija cada segundo según oferta y demanda.
Cuándo usar cada uno
Valor nominal: Prácticamente nunca en trading de acciones. Caso de excepción: bonos convertibles donde establece un precio de canje predeterminado.
Valor contable: Tu mejor aliado si practicas value investing. Compara el ratio P/VC (Precio/Valor Contable) entre competidores. Si Empresa A tiene P/VC = 0.8 y Empresa B = 1.2, la primera está más barata en términos contables.
Limitación: Falla estrepitosamente con tecnológicas y startups (tienen pocos activos tangibles pero alto valor intangible).
Valor de mercado: Es tu punto de entrada y salida. Aquí ejecutas compras/ventas. Úsalo con órdenes límite si esperas mejores precios:
Las trampas de cada método
Valor nominal: Obsoleto, casi sin utilidad práctica en renta variable moderna.
Valor contable: Puede contener “trampas contables” (maquilleo de cifras). Además, no capta bien el verdadero valor de empresas intensivas en I+D o con marca fuerte.
Valor de mercado: Es el más volátil. Se mueve por rumores, expectativas futuras, decisiones de bancos centrales sobre tipos de interés, noticias sectoriales… A veces desconecta completamente de la realidad financiera.
Caso real: Una política agresiva de tipos de interés puede hundir el valor de mercado aunque los fundamentales de la empresa no cambien.
Tabla rápida de referencia
El consejo final
No confíes en un solo número. Un inversor smart combina:
La mejor estrategia es usar los tres como herramientas distintas, nunca una sola. El valor nominal es prácticamente descartable, pero los otros dos forman una dupla que, bien interpretada, te ahorra errores costosos.