El movimiento de los precios del oro siempre ha sido el foco de atención de los inversores. Los análisis indican que hay dos factores clave que impulsan las variaciones en los precios del oro.

Primero, la demanda de refugio se vuelve especialmente importante en el actual entorno económico global. La hegemonía del dólar enfrenta desafíos, y la competencia entre Estados Unidos y China puede continuar durante un tiempo considerable. Al mismo tiempo, Estados Unidos enfrenta graves problemas de deuda, y el riesgo de interrupción en el funcionamiento del gobierno también agrava la inestabilidad del dólar. Además, la situación en el Medio Oriente y el conflicto entre Rusia y Ucrania también aumentan la incertidumbre en la economía global. En este contexto, los gobiernos de varios países comienzan a aumentar sus reservas de oro para diversificar riesgos.

En segundo lugar, la tendencia de flexibilización de la política monetaria global también está impulsando el aumento del precio del oro. Estados Unidos ya ha entrado en un ciclo de reducción de tasas de interés, y se espera que esta tendencia continúe al menos hasta 2028. Además, el fenómeno de la sobreproducción monetaria a nivel mundial también está elevando el valor del oro.

Desde una perspectiva histórica, los ciclos de precios del oro suelen ser de 10 o 20 años, y las fluctuaciones suelen ser bastante considerables, mostrando una relación proporcional con el tiempo. El actual mercado alcista del oro comenzó en 2019 y ha continuado durante aproximadamente 6 años, con un aumento del 311%. Sin embargo, tanto en términos de duración como de aumento, este mercado alcista parece estar aún en la mitad de su canal ascendente. Basado en el análisis actual, esta tendencia alcista podría continuar hasta alrededor de 2028, con un aumento total que se espera supere el 600%.

Los inversores, al seguir el mercado del oro, deben considerar de manera integral estos factores impulsadores a largo plazo, al mismo tiempo que deben prestar atención a los cambios en la economía global y la situación geopolítica, para poder tomar decisiones de inversión informadas.