¿De dónde proviene la confianza personal? En realidad, es muy simple: se trata de atreverse a hacer cualquier cosa, aceptar cualquier resultado y no preocuparse por nada. Porque una persona con una personalidad sana no debería basar su confianza en la aprobación social, ya que una vez que una persona busca la aceptación social, se convierte en esclavo de los demás o del entorno. Una vez que el entorno cambia o alguien te niega, tu voluntad y tu espíritu se desmoronan. Por lo tanto, tu confianza debe provenir del control absoluto que tienes sobre tus propias palabras, acciones y pensamientos, y ser capaz de aceptar las consecuencias de tus palabras, acciones y pensamientos, incluso si esas consecuencias son tan graves que podrían llevarte a la muerte. Cuando puedes cambiar cualquier cosa y aceptar cualquier resultado, obtienes una confianza inquebrantable, incluso si la mayoría de las personas están en tu contra, eso no te afectará.