
Un agente es un intermediario que conecta a un equipo de proyecto o plataforma con los usuarios finales, especialmente en mercados, canales y servicios de difícil acceso directo para el equipo oficial. En el ecosistema Web3, los agentes funcionan como tiendas regionales o socios de canal: impulsan la captación de usuarios, educan a nuevos participantes, facilitan pagos y procesos de cumplimiento, y reciben comisiones o tarifas de servicio según las normas establecidas.
En áreas como exchanges, wallets y aplicaciones descentralizadas (dApps), los agentes gestionan tres funciones clave: adquisición y promoción de usuarios, soporte localizado y coordinación de negocio. Esto abarca desde tutoriales de incorporación y guía en la verificación de identidad hasta la organización de eventos presenciales para ampliar la base de usuarios. Dado que los requisitos operativos y regulatorios varían mucho según la región, muchas marcas delegan estas tareas en agentes con experiencia local.
La presencia de agentes es mayor en Web3 debido a los retos del cumplimiento internacional, los altos costes de captación de usuarios y la necesidad de servicios adaptados localmente. Las diferencias en normativas, métodos de pago y redes sociales entre países dificultan que una sola plantilla cubra todo. Los agentes son esenciales para la ejecución local.
Además, la educación y la generación de confianza inicial suelen requerir interacción presencial. El OTC (over-the-counter trading—operaciones directas entre comerciantes y usuarios fuera de los motores de emparejamiento) y los eventos offline son habituales en muchas regiones, donde los agentes desempeñan un papel fundamental. Los recién llegados suelen necesitar ayuda con el KYC (Know Your Customer—verificación de identidad para el cumplimiento), por lo que los agentes ayudan a las plataformas a reducir costes de captación y servicio.
Normalmente, los agentes trabajan bajo un modelo de “contrato + desempeño”: el proyecto fija objetivos (nuevos usuarios activos, volumen de trading, número de nodos), el agente diseña estrategias locales e informa periódicamente, y la remuneración depende de los resultados.
El flujo de trabajo incluye identificación de necesidades, revisión de soluciones, controles de cumplimiento, firma de contrato, ejecución de campañas y validación de datos. Los proyectos proporcionan enlaces oficiales, códigos de invitación y sistemas de seguimiento para garantizar transparencia en estadísticas y liquidaciones.
Los agentes obtienen ingresos principalmente por tres vías:
Por ejemplo, en promociones de exchange: si un agente ayuda a captar nuevos usuarios que después operan, las comisiones se liquidan según las tarifas generadas por estos usuarios. Los porcentajes y requisitos de cumplimiento siguen las directrices públicas y los contratos. Para evitar disputas, los proyectos suelen ofrecer paneles de datos para verificación.
Los agentes son contratistas operativos regionales que gestionan captación de usuarios, prestación de servicios y ejecución—con mayores responsabilidades y obligaciones regulatorias. Los brókeres solo presentan clientes; el soporte postventa y el cumplimiento dependen de la plataforma. Los distribuidores se centran en la venta de productos (por ejemplo, hardware wallets o paquetes empresariales), obteniendo beneficios del margen o retrocesiones.
En Web3, los equipos pueden ejercer varios roles a la vez: generar leads como brókeres y gestionar eventos y formación postventa. Las diferencias dependen del alcance del contrato, los criterios de liquidación y quién asume la responsabilidad de cumplimiento.
En exchanges, los agentes participan en programas de bróker/canal, actividades de comerciante OTC y colaboraciones educativas. Por ejemplo, Gate ofrece portales de socios, códigos de invitación y paneles de datos oficiales; las liquidaciones siguen las reglas públicas de bróker/canal.
Utilice siempre enlaces oficiales de Gate, sistemas backend certificados y métodos de liquidación designados. Evite pagos o canales no oficiales para proteger los intereses de ambas partes y la seguridad de los fondos de los usuarios.
Los agentes afrontan dos grandes riesgos: financieros y regulatorios. En el plano financiero, deben evitar aceptar o retener fondos de clientes de forma privada—esto puede derivar en apropiaciones indebidas o disputas. En cumplimiento, deben respetar la normativa local de publicidad y los requisitos de prevención de blanqueo de capitales (AML); el KYC debe realizarse siempre a través del sistema oficial—está prohibido falsificar o tramitar documentación en nombre de clientes.
Las medidas para reducir riesgos incluyen:
Para operar con eficacia como agente se requiere experiencia en cuatro áreas: canales, cumplimiento, operaciones y datos.
Los proyectos en lanzamiento o expansión regional son los que más requieren agentes—por ejemplo: exchanges recién lanzados, wallets para mercados emergentes o aplicaciones que requieren formación en onboarding fiat. Juegos Web3, campañas de captación de nodos y servicios B2B empresariales también dependen de socios locales para generar confianza y networking al inicio.
Cuando una marca consolida la conversión online en una región o ofrece productos autoservicio (con tutoriales/soporte online completos), la necesidad de agentes disminuye. La decisión depende de la complejidad de la localización, las exigencias regulatorias y el análisis coste-beneficio.
En 2025, el sector exige mayor cumplimiento y transparencia de datos: las plataformas convierten las “comisiones por referidos” en “servicios regulados”, con estándares más altos en marketing, procesos y liquidaciones. La liquidación es digital—paneles de plataforma y registros on-chain facilitan la conciliación; los pagos en stablecoins y las auditorías periódicas son habituales.
Los agentes evolucionan hacia proveedores de servicios integrales—no solo captan usuarios, sino que ofrecen formación, soporte y consultoría de cumplimiento local. Las operaciones multirregionales y multilingües hacen destacar a los equipos profesionales con habilidades especializadas.
Los agentes son ejecutores locales que conectan plataformas y usuarios—aportan valor con captación, formación, cumplimiento y eventos. Sus ingresos provienen de comisiones, reparto de beneficios o tarifas de servicio. En exchanges, la conciliación debe hacerse siempre con sistemas oficiales; es clave no custodiar fondos de clientes ni tramitar KYC en nombre de usuarios. La decisión de emplear agentes depende de la dificultad de localización y el coste-beneficio. El futuro es mayor integración regulatoria, digitalización de procesos y profesionalización—los equipos que equilibren crecimiento, operaciones y gestión de riesgos tendrán ventajas competitivas.
El agente no posee inventario—representa a fabricantes en ventas y cobra comisiones. El distribuidor compra inventario y obtiene beneficio del margen de reventa. En resumen: el agente es un intermediario; el distribuidor, un revendedor. En Web3, el modelo de agencia predomina porque no se requiere custodia de activos.
Tres requisitos principales: una base de usuarios o influencia en la comunidad; conocimientos básicos de trading de criptomonedas; capacidad para establecer sistemas profesionales de coordinación y gestión. Cada exchange (como Gate) define sus criterios—la mayoría ofrece formación y herramientas para facilitar el acceso.
El ingreso depende directamente del volumen de trading de los usuarios y del reparto de comisiones—puede ser alto en mercados alcistas y bajar en bajistas. Para mantener ingresos estables: amplíe su base de usuarios efectiva, aumente la actividad y negocie mejores condiciones con las plataformas. Se recomienda empezar con plataformas líderes como Gate para ganar experiencia.
Los riesgos clave son controles laxos de identidad que pueden incumplir normas AML/KYC; relaciones de agencia poco claras que generen disputas legales; y responsabilidad por pérdidas de usuarios. Colabore siempre con plataformas reguladas (como Gate), siga sus procedimientos de KYC y guarde registros de transacciones y comunicaciones.
El agente representa fabricantes y cobra comisiones de ventas; el bróker conecta compradores y vendedores por comisiones de transacción; el distribuidor se centra en beneficios de canal por el margen mayorista-minorista. En exchanges o campañas de recaudación, los agentes tienen más autoridad y alianzas más profundas—pero también más responsabilidades. Elija su rol según sus fortalezas y tolerancia al riesgo.


